En una cacerola grande de fondo grueso, caliente el aceite a fuego medio. Freír el pollo, la cebolla y el ajo, revolviendo ocasionalmente, durante 10 minutos hasta que estén dorados. Condimentar con sal y pimienta. Agrega la salsa para pasta, el vino, las alcaparras y el orégano. Reduzca el fuego a medio-bajo y cocine, revolviendo ocasionalmente, durante 40 minutos o hasta que la salsa espese.